La limpieza de los mejillones puede ser esmerada o simplemente "higienizarlos".
La limpieza esmerada se hace si los vas a servir con las conchas. Consiste en quitarles las barbas del pie del mejillón y luego raspar con el cuchillo las conchas hasta quitar todo lo adherido a ellas.
La limpieza rápida, se hace quitando las barbas y una raspada rápida por la concha, eliminando lo que al cocer pueda ensuciar el caldo.
1 comentario:
Para los vagos, ponnos una entrada al vapor, y simplemente pasados por el grifo, sin rascar mucho...
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